Viejas campañas de moda que me hacen soñar que, vistiendo como se vestía, molaba mas Versace en 1993 que en 2009.

Estas fotos de la campaña de verano de la colección de Gianni Versace del año 1993 supusieron para la firma un Renacimiento, no es que Versace tuviera problemas económicos o se hubiera devaluado, al contrario, tras años de reinado absoluto la firma necesitaba un cambio que la redefiniera y de paso centrara las bases de la mujer versace de los 90's. La leyenda negra dice que después de sufrir un extraño cáncer de tímpano el gran Gianni se volvió mas hedonista de lo que ya era y quiso restarle frivolidad a su casa y potenciar su lado espiritual.



Tras años de cueros, aberturas, drapeados, pechos increíbles y precios desorbitados, la mujer que Gianni concibió a fianles de los 70's languidecía en en el cuarto oscuro de Studio 54. Decía el personaje de Marisa Paredes en Tacones Lejanos que "no se podía ser cantante Pop a los cincuenta" y que había que reciclarse (después llegó Madonna y les enseñó a todos que si se podía).

La re-invención de la firma comenzó el día del desfile y culminó en la sesión de fotos maratoniana que Richard Avedon organizó en unos estudios de N.Y. con Kristen Macmenamy, Naomi Cmpabell, Kate Moss, Aya,la recién llegada Shalom Harlow, Stephanie Seymour, y el hermanísimo Nick Moss. Kate y su hermano Nick, que no volvió a trabajar como modelo y nada se ha sabido de él en los últimos años, dotaron a esta campaña de un punto nuevo en el universo de la firma italiana, el punto bohemio y callejero, aunque Versace opinaba que Moss era bajita, encorvada y que tenía una cara rara, vió en ella un potencial brutal antes que nadie.


Linda Evangelista hizo su divina aparición el segundo día de la sesión de fotos que para eso es la mas grande. Se trataba de darle una nueva cara a la casa de la Medusa con un look mas terrenal y natural, que en aquella época se denominó Hippie Chic, una ridiculez de nombre para describir a mujeres disfrazadas de falsas perroflautas.


Tras varias campañas seguidas fotografiadas por Herb Ritts, Versace volvió a contar con Richard Avedon. Avedon supo sacarle jugo a una colección que vista ahora mismo desde la distancia puede resultar completamente absurda, sobre todo si lo que se pretendía era dar un giro hacia el minimalismo que ya se avecinaba desde los EEUU, hay pantalones de campana de lunares, rayas y cuadros, tops de mangas enormes estampados de flores en colores chillones pero aun así el resultado fue espectacular y resituó a la casa en lo cool...en lo que se entendía como cool en 1993. De hecho la ropa, los trapos, aparecieron en mas de cien editoriales de moda diferentes y fue el vestuario de Verónica Forqué, Bibiana y Rossy en Kika de Almodóvar.


Lo que está claro, a pesar de que las fotos son increíbles y las modelos y el fotógrafo son maravillosos, es que este giro no se hubiera producido con éxito sino hubiera estado detrás la mano mágica y el talento de un personaje tan fascinante como Gianni Versace, porque campañas tan extraordinarias como esta con modelos igual de buenas o mas ha tenido la casa desde la muerte del tio de Allegra Beck casi cada temporada, de hecho, creo que lo mejor de las colecciones de Donatella son las campañas de moda, pero sin el talento necesario tras unas simples fotos, sólo quedan en nuestra retina imágenes que se entremezclan entre si y no distingues una campaña de otra ni la que protagonizó Demi Moore de la que protagonizaron las ultimas top models del este de los últimos seis meses.


Espabila Donatella.

Twilight: una historia de moda.

Hace unos días,gracias a un post del señor Alterego, movido por un impulso paranormal, me fui a un videoclub (?????????).

Puede resultar raro, la verdad es que lo es, hacía años que no pisaba uno, ahora con las descargas de internet, los top manta y las ventas directas de títulos a buen precio nadie en su sano juicio se va a un videoclub a alquilar una película. Yo no me descargo nada de internet por pereza e inutilidad, además que es ilegal y yo no incumplo leyes...que es pecado.


Cómo han cambiado las cosas y los videoclubs!. Estos a finales de los 80's eran el sumun del comercio de calle, había uno en cada esquina a cada cual mas grande y poderoso, con el tiempo se convirtieron en Cadenas 100, mas tarde en chinos, después en cibercafés y luego en locutorios. Los pocos videoclubs que sobrevivieron lo hicieron a base de llévate cinco películas por cuatro euros durante una semana y te regalo este caldero con palomitas. A lo que voy, que me alquilé varios títulos mientras sorteaba las estanterías de porno hetero. El porno hetero es contranatura y Lucía Lapiedra y Nacho Vidal (Sasoon) me dan miedo.


Crepúsculo fue la primera película que renté. Robert Pattinson está muy bueno, tiene un morbo que supura romanticismo y sexo del bueno por todos y cada uno de sus muy peinados pelos de su tupé, si tuviera 15 años querría tener el pelo como él, y su piel, y su cazadora de paño, y su Volvo, y sus abdominales, y sus labios rojos rouge a lèvres de Chanel número 25, si tuviera 15 o 16 años quisiera tenerlos. No me extendiendo mas que me excito. Crepúsculo es una historia de amor adolescente entre un vampiro que está muy bueno y una adolescente triste tipo Juno pero sin embarazo. A priori la película puede resultar una mierda, la verdad es que es como un videoclip de hora y media pero bajo todos esos efectos especiales hay una verdadera historia de moda, una interesante teoría que plantea un gran dilema: Roberto Cavalli o Jil Sander?.


De lo que nadie ha hablado de esta película es que es una historia de moda, el maximalismo contra el minimalismo, Versace contra Narciso Chico Rodríguez. Puede que resulte extraño para los NO FASHION esta afirmación pero en la película se ve muy claro. La familia de Pattinson, los Cullem, representan el estilo minimalista, líneas depuradas, ausencia de estampados, de bordados, drapeados y rollo trash, todos ellos son blancos como la leche y cuando les da el sol, porque estos vampiros son tan guays que no mueren si les da el sol, su piel no se derrite ni es verde ni nada de eso, su piel es de cristales Swarosky. Son tan geniales que viven en la casa de la cascada de Frank Lloyd Wright y lo mejor de todo es que no beben sangre humana, vamos que son buenos como Narciso, Jil, Helmut Lang...Los Cullem son supersnobs y no se relacionan con nadie en el instituto, no ingieren sólidos y tienen ese aire distinguido que sólo poseen los modelos, son tan guays y buenos que sólo beben la de los animales, una especie de vegetarianismo vampírico.


La chica de Pattinson en la película es la típica morena de piel blanca que viste fatal, siempre va de negro, no se peina, y se pasea por el pueblo donde vive con su padre en una furgoneta naranja muy fea y destartalada que le vendieron sus colegas indios de la reserva. Ella tiene un poder sobrenatural con respecto a sus compañeros, sabe leer y acude a bibliotecas y demás antros. Está claro que esta chica representa al típico diamante en bruto del mundo de la moda a la que sus mentores quieren convertir en una señorita, una especie de My Fair Lady amante de vampiros recubiertos de cristales de Swaroski.

Los Nómadas, los malos, son tres, son medio hippiosos y drogos, llevan el pelo largo, van descalzos, al ser nómadas no tienen casa. El grupo lo forman dos chicos y una chica. La chica lleva pantalones de campana bajos de cintura, un top, un abrigo de pelo blanco, el pelo rubio suelto y ondulado . Hay un rubio mal teñido de coleta baja, cazadora de cuero ceñida y vaqueros desgastados y rotos. Hay un negro en el grupo (?)lleva rastas y las mismas trazas que los otros dos. Está claro que han salido de un anuncio de Roberto Cavalli de 1998. Al igual que los Cullem también quieren convertir a la chica mal vestida en uno de los suyos, aunque éstos al contrario de los otros, quieren que la chica vista como cuando J.Lo va de estrella del pop.


He hablado con gente que ha visto la película y no he sacado grandes conclusiones al respecto. Mis amigos maricas sólo tienen opiniones que no puedo expresar sobre lo que le harían a Pattinson si se lo encontraran por la calle, pero como estamos en horario protegido no lo puedo contar aquí. A mis amigas, por el contrario, mi teoría sobre el bien y el mal, el maximalismo y el minimalismo les ha parecido sonrojante a la par que delirante y un poco cateta, me han dicho que vaya al psiquiatra que hay unas pastillas muy buenas para lo mío...serán putas, ellas que lo único que hacen es tener hijos que se llaman como los amigos de mi padre, Pepe, Elías, Amparo...ahora lo mas es tener hijos con nombres de adultos, eso y llamarlos a gritos.