jueves, 15 de enero de 2009

Vogue.

Los rumores han llegado a la calle, al vulgo, muchos de mis amigos no-fashion se han enterado de quien es Anna Wintour el año pasado con el fenómeno del Diablo viste de Prada y este(año) se han lanzado sin piedad a criticar su personalidad, las portadas de la revista y su contenido. Todo esto sin haber tenido en su mano ni un solo número de la revista. Me maravilla, alguno de ellos leyó en algún periódico que se hacia eco de los rumores de retiro de la Wintour, y me preguntan qué diferencia hay entre una edición americana y la italiana o la francesa y la inglesa, algunos pensaban que la misma revista se traducía a los diferentes idiomas del mundo.


Yo me río, me hace gracia cómo habla la gente desde el desconocimiento y el machismo mas ibérico que el jamón. Como es una mujer poderosa es una zorra, así de sencillo. El Vogue Usa es una de las revistas mas rentables del grupo Condé Nast, los que hablan de que Vogue se va a la mierda por falta de anunciantes, etc. Lo primero que tengo que decir, a parte de que la revista es cara de producir, es que selecciona a sus anunciantes, es decir ellos eligen quien se anuncia en la revista, y lo que prima son anuncios de casas de moda , de las buenas y de las malas, y si, hay muchos anuncios de champú pero no traen muestras. Además hay una crisis importante de los clientes que se anuncian en la revista y en la prensa en general.



El famoso artículo de El Pais citaba fuentes que nombraban a fotógrafos como Annie Leibovitz, Helmut Newton o Irving Penn, yo voy mas allá, en dicho artículo no nombraban algo que todos nosotros utilizamos casi a diario. La web de Vogue Usa, el famosísimo style.com, es una de las mejores webs de moda del planeta, cubre y actuliza a diario el quien es quien del mundillo y lleva años haciéndose eco de todas las novedades fashion, evidentemente de todas las que importan de verdad. Style es un regalo del cielo para cualquier amante de la moda, amateur, senior o aficionado, una página en la que puedes ver colecciones foto a foto de los diseñadores mas relevantes, amen de colaboradores geniales como Tim Blank, Candy Pratts Smith o el mismísimo Sartorialist.



Otra cosa que tengo que decir sobre la revista es que está hecha para el público americano, la moda que exhiben sus editoriales está dirigida a mujeres que compran la revista para que les guíe en sus tardes de shopping con chófer. Desde luego en Vogue nunca veremos un pecho al aire o editoriales tan jevis como la italiana o la francesa en la que su público tiene la manga mas ancha a desnudos y portadas chocantes. A mi me jode que no saquen modelos de primera fila en su portada y que estén todo el tiempo saliendo Jennifer Aniston y compañía pero su público no distingue a la nuevas modelos y ellos son muy exigentes con las nuevas chicas.




En Vogue Usa, enseñan a esas mujeres que pueden pagarlo, cuál es el traje perfecto, qué colecciones son importantes y qué maquillaje deben llevar. Vogue en Estados Unidos es una revista muy marcada por sus lectores y la miles de asociaciones fuertes que mes tras mes protestan contra un editorial, por ejemplo, en la que las modelos posan en un edificio en construcción sin las debidas medidas de seguridad. Pues bien, la Asociación Americana de Obreros de la Construcción envía una carta de protesta y ellos la publican. He leído en Vogue Usa como la Asociación Americana de Músicos protestaba por la forma en la que Briget Hall cogía la guitarra en un editorial sobre moda hippie fotografiado por Testino.


Mucho criticar la revista y todos nos lanzamos como buitres para ver cada mes el editorial que style cuelga y es el único de muchos que permiten que veamos sin gastarnos ocho euros y pico en la versión de papel.

Anna reza el rosario para no ser despedida.

Os digo de verdad que la revista, no la portada, me ha hecho pasar muy buenos momentos y como llevo muchos años comprándola he tenido la suerte no sólo de ver a las mejores modelos y fotógrafos del mundo sino también ver despuntar a gente que ahora es una celebridad como Mario Testino o Mert Alas y Marcus Pigott, y os aseguro que es una pasada esa sensación de ver nacer a leyendas de la moda.

Gracias señora Wintour.