Dice
Paco Rabanne que todos estos payasos modernos con el tiempo se convertirán en clásicos. Todos sabemos de los poderes adivinatorios del
Señor Rabanilla pero en parte tiene razón. Esta respuesta la dio cuando le preguntaron por las colecciones de
Galliano para una firma clásica y francesa como
Dior, claro él no ha traicionado su espíritu pero si su negocio que se ha reducido a la perfumería tras la última intentona por parte de los
Puig, dueños de la firma, de relanzar la firma de la mano de
Patrick Robinson, norteamericano, negro, esposo de una colaboradora de
Vogue Usa que fue recomendado por
André Leon Talley y
Anna Wintour. No duró ni dos temporadas.
A lo que voy con el clasicismo y los diseñadores, se supone que la creatividad de un genio se mantiene intacta hasta los treinta y baja a los mínimos partir de los treinta y cinco. A partir de aquí toda esa explosión creativa de la juventud se ve reducida y aquí comienza el auto homenaje. Las mismas siluetas mas sobrias, sin aditamentos, de mas a menos.
De los pocos creadores a los que esto no les afecta a pesar de su edad es a
Oscar de la Renta que cada año es mejor o si no....
