Una década de moda. Ay!,cómo hemos cambiado!.

Si algo ha caracterizado esta primera década de siglo han sido los cambios en las principales firmas, las estrellas de la moda, los diseñadores, han cambiado de manos o de empresas como antiguamente lo hacían las estrellas de Hollywood y ahora los entrenadores y jugadores de fútbol. El mejor postor se llevaba al mejor diseñador pero no dudaba en despedirlo en menos de seis meses. Los tiempos de Karly diseñando para Fendi, Chloé, Chanel y su propia firma tocaron a su fin.

A finales de los 90's los grandes holdings de moda como L.V.M.H. y P.P.R. acaparan mas del 50% del negocio mundial del lujo , sólo unos pocos quedan independientes, Armani, Chanel, Versace o Dolce&Gabbanna. En los 90's las direcciones creativas de las casas de Costura se mantenían inalterables, prácticamente no hubo cambios importantes en esa época, los jefazos confiaban en un diseñador a largo plazo y lo raro era que fuera sustituido por otro mas joven. La veda la abrió François Arnaud fichando a Galliano para relanzar una de sus firmas mas prestigiosas y ancladas en el pasado: Givenchy. El experimento funcionó y recolocó a la vieja maison en el punto de mira de revistas, estilistas y compradores.


Desde la retirada de Hubert de Givenchy, la maison de L 'interdit, la casa que vestía a Audrey Hepburn, ha sufrido mas de cuatro cambios en su dirección creativa, el señor Givenchy debe estar revolviéndose...en su casa, primero fue Galliano que firmó varias colecciones hasta su salto a la dirección creativa del buque insignia del grupo, Christian Dior, fue sustituido por Alexander Mcqueen, una oportunidad de oro para el inglés para darse a conocer al gran público. Así comenzó Givenchy el siglo, de la mano de Mcqueen que fue sustituido por Julien Mcdonald tras fichar para los franceses P.P.R., el enemigo del grupo de Arnaud. Ahora Givenchy lo diseña Ricardo Tisci un italiano bastante trascendental de humildísimos orígenes.


En el 2000 Lanvin lo diseñaba una española que había trabajado para Prada, Cristina Ortiz. Ella es de las que mas ha sufrido los altibajos del negocio . Su Lanvin no tiene nada que ver con lo que es ahora pero tuvo un éxito (relativo) en su época. Pasó de Lanvin a Brioni, se suponía que iba a relanzar la colección femenina, pero por lo visto fracasó, a continuación comenzó a diseñar para Salvatore Ferragamo y ahora creo que está en el paro. Tras Ortiz en 2002 llegó Alber Elbaz , él ha convertido esta firma en una de las imprescindibles de este nuevo siglo gracias a su talento, a su visión del nuevo romanticismo y a la confianza de sus jefes que apostaron por él a largo plazo.


Es curioso porque antes de fichar por Lanvin, Alber Elbaz firmaba las colecciones de prêt à porter de YSL, elegido por el propio Monsieur, el sueño nos duró dos temporadas (deliciosas y minimalistas pero claramente identificables como saint laurentianas) hasta la llegada de Tom Ford y su equipo. Ford, alternó esta dirección creativa con la de Gucci, fue su época mas convulsa en cuanto a críticas se refiere, su saint laurent era diametralmente opuesto a todas y cada una de las reglas de su fundador.


Mientras tanto en Milán se vivía una guerra soterrada, la lucha por el control de Gucci, dejaba a Ford y De Sole, fuera del grupo que controla Saint Laurent y Gucci en 2003, y convertía a unos desconocidos Stephano Pilati, Alessandra Faccinetti y Frida Gianini en las nuevas caras al frente de la dirección creativa de una de las firmas mas exitosas del final del siglo veinte, uno para las colecciones masculinas, otro para las femeninas y la tercera para las de complementos. En 2004 Pilati se convertía en director creativo de Saint Laurent, Faccineti conseguía hacer bajar las ventas de la división femenina de Gucci siendo sustituida mas tarde por Frida Gianini que hoy continúa al frente de la casa.


En Valentino las cosas se mantenían perennes en el comienzo de siglo hasta que el grupo Marzotto compraba una de las empresas de Costura y prêt à porter mas longevas del siglo pasado. Tras la retirada de Valentino Garavani en el 2007, Faccinetti pasaba de hundir las ventas de Gucci para empezar a hundir las de Valentino, su valentino decepcionó a todos hasta su despedida siendo sustituida por dos desconociods ex- asistentes del maestro y aprobados por el mismo, Maria Grazi Chiuri y Pier Paolo Piccioli.


Por primera vez en la historia de la moda la división de hombre de una firma era tan o igual de famosa que la femenina, Dior comenzó el siglo siendo sinónimo de cool y juventud . En Dior Homme, Hedi Slimane(que había trabajado un par de temporadas en la división de hombre de YSL) revolucionaba el armario masculino para siempre, basando sus propuesta en un look andrógino y completamente skinny, Slimane triunfó y revolucionó el patronaje masculino desde las mejores perchas de celebridades femeninas, ellas, se morían por vestir sus smokings masculinos. Una propuesta joven y muy de este nuevo siglo que duró hasta el 2007 cuando Slimane dejó Dior y fue contratado para sustituirlo Kris Van Assche que a su vez no ha terminado el siglo en la casa ya que ha sido sustituido por Gareth Puag.(ERROR: parece ser que lo de Gareth es un rumor y que Kris continúa diseñando para Dior Homme...está bueno Kris, eh?).


En Ferré tampoco se anduvieron con remilgos tras la muerte de su orondo Jefe, Lars Nilsson, que a su vez venía rebotado primero de Nina Ricci y después de Bill Blass, no llegó a saborear ni las críticas buenas ni las malas ya que tras la presentación de su segunda colección fue despedido, antes de que sus prendas llegaran a las tiendas él ya estaba de vuelta en los E.E.U.U. Fue sustituido por otro dúo, el formado por el tándem Tomasso Aquilano y Roberto Rimondi que no han tenido mucha suerte ya que tras presentar su primera colección la empresa que producía las prendas, el grupo It Holding SPA, se declaró en bancarrota.


Olivier Theyskens comenzó el siglo vistiendo a Madonna de gótica y siendo una de las promesas de esta década que mas veces se ha estrellado pese a tener unas críticas excelentes en todas sus facetas. Puede que sea el que tiene el récord de casas en las que ha trabajado junto a Nilsson y Ortiz, Theyskens ha pasado de Rochas a Ricci. En ambos casos las críticas fueron maravillosas ya que su talento era capaz de hacer algo diferente e identificativo para cada una de ellas, él es una de las víctimas de los vaivenes del negocio que le han dejado en el paro y sin su propia firma que está congelada desde 2002.


En Chloé tampoco han escapado a los cambios en su dirección artística. En el 2000 Stella Mcartney y Phoebe Philo disfrutaban de un éxito sin precedentes, un éxito de ventas y de popularidad, los grandes retailers copiaban sus pantalones de cintura baja y sus tops asimétricos, sus complementos eran los mas deseados por las mujeres. Mcartney dejó tras su marcha a Philo al cargo y tras la marcha de esta para ser madre fue sustituida por Paolo Melim Anderson, que duró dos temporadas , fue sustituido por Hana McGibbons, que por lo que sé, ahí sigue.


Creo que el caso mas sangrante ha sido el de Balmain. Ojeando viejas colecciones de Oscar de la Renta, que fue director creativo hasta 2002 , el cambio resulta sonrojante. En el 2000 esta vieja firma era diseñada por un ex-asistente de Karly en Chanel, Gilles Dufour, tendría mucho talento para las relaciones públicas y para servirle a Karly las cocacolas zero, pero para diseñar ropa hace falta algo mas. El tío de Victoire de Castellaine, antigua encargada de la división de bisuta y joyería de Chanel y ahora encargada de las de Dior, contó para su primer desfile con la presencia de Claudia Schiffer en su desfile, supongo que por amistad, o dinero. Dufour convivió en la maison con Oscar de la Renta que continuaba diseñando las colecciones de Costura. En 2002 tanto esta división como la de prêt à porter fueron canceladas hasta 2007 con la llegada de Christophe Decarnin y su versión rockera de Pierre Balmain. En sólo diez años la venerable firma ha pasado de esto:






A esto:






Paco Rabanne comenzó el siglo anunciando el fin del planeta, lo que no previó fue el fin de su firma, tras la contratación de Rosemary Fernández primero y de Patrick Robinson después los Puig, dueños de la firma, cancelaron la divisón de Costura y Prêt à porter, sólo quedan los perfumes.

Lo de Loewe es dramático. Tras la compra por parte de L.V.H.M. de la firma española, Loewe ha sufrido primero con Narciso Rodríguez y su minimalismo, luego con la joven promesa, Jose Enrique Oña Selfa, una propuesta interesante que no caló en la prensa internacional, ahora Stuart Vevers, que da mucho miedo, diseña, con mucha ayuda, las colecciones de un Loewe bastante raro y muy kinky. Tampoco hay mucha suerte y como dice Sr Q. han conseguido un triunfo, colar un sombrero de marinero en los editoriales internacionales(?). Gran éxito!.


Esto son sólo algunos de los cambios que han ocurrido en algunas de las firmas mas importantes del siglo veinte. Lo mas insólito de todo es que todo ha ocurrido en sólo diez años, y algo mas que se me ha quedado en el tintero como los tres o cuatro diseñadores que lleva Pucci. Es bastante horrible cómo los holdings de moda se aprovechan de su cartera de firmas de lujo de las que abusan gracias al prestigio que los fundadores de las mismas y al calado que en nuestras sociedades han dejado a lo largo de los años, aprovecharse de la leyenda de Pierre Balmain y traicionar todo su legado con esos pantalones rotos y desgastados con enzimas de dos mil euros, es una auténtica y genuina vergüenza, hay veces que cuando el diseñador desaparece deberían desaparecer también sus casas de Costura con ellos para que nadie pueda mancillarlas.

Los datos marean y eso que seguro que me he olvidado la mitad.